Impunidad. Del latín impunitas significa 'sin castigo'.
España es esa nación tan singular en la que muchos españoles presumen de ser antiespañoles, se avergüenzan de serlo y, por si fuera o fuese poco, rinden pleitesía a quienes tienen como norte acabar con ella. Con dos cojones.
El primero y más significativo de sus detractores es un tal Pedro Sánchez Castejón, también conocido como Peligro Sánchez o Pedro I El Mentiroso, o simplemente ..., que hay para todos los gustos.
La impunidad a causa de la corrupción política, notoria en España, es especialmente sangrante. Si, además, es sectaria, las consecuencias para la sociedad son nefastas, pues crean indefensión, desconfianza y abulia en la ciudadanía, lo que produce una hemorragia democrática de consecuencias imprevisibles.
La impunidad que una parte de la ciudadanía española ha otorgado a Pedro Sánchez le hace merecedor, ahora sí, de un Doctorado en deconstrucción de democracias. Y lloraremos por ello. Unos más que otros. Y me entristecerá que sufran las consecuencias quienes no han sido cómplices de semejante barbarie. Pero, permítanme un acto de parresía: me alegraré, mucho, de las penurias que pasarán buena parte de quienes no se limitaron a legitimarlos con su voto, sino que osaron llamarnos fascistas a cuantos nos permitimos el 'sacrilegio' de disentir. Llámenme malo, lo asumo.
quienes 'compran' que Ortega Lara no fue secuestrado por ETA y que simplemente decidió ir a vivir a un zulo de 3 por 2, son unos cínicos cómplices de su impunidad
Pedro Sánchez es un cínico (palabra griega que significa perro, en sentido peyorativo) que osa llamar fascistas a Felipe González y a Alfonso Guerra. No él, directamente, porque es un cínico, sino sus 'perros' en nómina: la Maruja, los Papell, el Zaragoza,... Miente compulsivamente, se ríe de nosotros, pervierte las Instituciones, fomenta el enfrentamiento civil, pacta con Bilduetarras, hispanófobos y comunistas, negocia con delincuentes… Y no pasa nada.
Pero quienes le avalan son peores. Quienes aceptan que Otegi no es un terrorista sino un hombre de paz, quienes permiten que un cobarde xenófobo, desde el anonimato, te llame 'ñordo', quienes afirman que Puigdemont no es un prófugo sino alguien que ha fijado su residencia en Bruselas, quienes 'compran' que Ortega Lara no fue secuestrado por ETA y que simplemente decidió ir a vivir a un zulo de 3 por 2, son unos cínicos cómplices de su impunidad.
A todos ellos, y a todos los excrementos que, desde los medios, le complacen, mi más sincero desprecio.
José Simón Gracia
Querido amigo Simón; reflejas magistralmente en este post el sentir de buena parte de la ciudadanía española; lo que pensamos y sentimos muchos y, las consecuencias de lo que puede ocurrir y va a ocurrir con toda seguridad, si Dios no lo remedia, ya que, todos con nuestro libre albedrío, unos más que otros, nos hemos empeñado en que así sea.
ResponderEliminarNos diluimos como azucarillos y, ante tal posibilidad no veo a los partidos de la derecha con el vigor ni el convencimiento suficiente - hasta el momento - de plantar cara.
Quizás nos lo merecemos.
Un abrazo.